divendres, 3 d’abril del 2009

1717


Este post está dedicado a toda la gente de la UR-9, y en especial a los 19 del 17.

Mañana, sábado 4 de abril, es uno de los días destacados en Mi Calendario Particular. En primer lugar, es el cumpleaños de la Princesa Almenas, pero ella recibirá en persona mi felicitación....en segundo lugar, hará dos años que llegué a la cartería en que trabajo. Los caprichos del calendario quieren que la fecha caiga en sábado y tenga que celebrarlo hoy, viernes, pero lo importante es poder hacerlo.
Cuando llegué aquel miércoles ya tan lejano se suponía que sólo iba a quedarme unos días, por una baja, pero poco a poco el tiempo fue pasando, enlacé varios contratos y ahora tengo la sensación de que siempre he trabajado allí y podría hacerlo indefinidamente; fue allí donde me vestí de uniforme por primera vez y donde realmente he comprendido lo mucho que me gusta mi trabajo. No voy a quedarme para siempre y en unos meses tendré que marcharme, así que puede parecer extraño celebrar un aniversario que no tendrá continuidad, pero no me importa; la fecha es una excusa, lo que quiero es compartirlo con las personas que trabajan conmigo, porque también es Nuestro Segundo Aniversario. Son ellos los que hacen de un trabajo que puede ser muy rutinario, una experiencia nueva cada día y que no me cueste levantarme para ir a trabajar, (a ver, me cuesta, mucho, pero hablo en sentido figurado), disfruto en su compañía y aunque a veces la carga de trabajo nos abruma, no hay día que no nos riamos juntos; he hecho amigos entre ellos, cosa que a muchos puede parecer extraño e incluso imposible, y amigos de verdad, de los que están ahí cuando los necesitas, a los que puedes confiar tus problemas y tus alegrías, que te apoyan y se solidarizan contigo...con ellos, es imposible caer en El día de la Marmota.

Dos años dan para mucho y me han sucedido muchas cosas en este tiempo, unas mejores y otras peores, y algunas no hubieran tenido lugar si no hubiera atravesado la puerta aquel 4 de abril, oportunidades que pude aprovechar porque estaba allí o porque el trabajo me lo permitía.....el destino de nuevo? no sé, pero a veces pienso que efectivamente no pudo ser casualidad, he tenido tanta suerte que no puede deberse sólo al azar....por el momento, seguiré madrugando a las horas en que las calles aún no estan puestas y seguiré disfrutando de lo que hago, del ambiente de cartería y de la gente extraordinaria con quien trabajo.
Va por todos vosotros, chicos.